El gran formato se vuelve fácil gracias a la tecnología de pasta blanca
Los interiores de moda de los años venideros se caracterizarán cada vez más por azulejos de gran formato, un recurso estilístico y arquitectónico que permite revestir grandes superficies combinando diseño y practicidad, sin poner límites a la belleza.
Si las grandes placas del pasado establecían límites de espesor, en la actualidad sus dimensiones se reducen a unos pocos milímetros, lo que las hace más flexibles y fáciles de colocar: con uno o pocos elementos pueden realizarse aplicaciones innovadoras, paredes decorativas y mobiliario de cerámica, como mesas y encimeras.
Ha sido superado, pues, el último límite, el del gres porcelánico, más resistente y, por lo tanto, más difícil de perforar, cortar y adaptar a las realizaciones más singulares.
Gracias al nuevo revestimiento de pasta blanca de FAP, las grandes placas son más suaves, ligeras, fáciles de acabar y de plasmar según las ideas de diseño más creativas.